lunes, 12 de julio de 2010

Sexenios de cuatro


2009 fue año de elecciones intermedias. En este 2010 hubo elecciones en casi la mitad de nuestro país. Unos ganaron y otros perdieron, unos reclamaron y otros festejaron, unos acusaron y otros se lavaron las manos (mismas que se enmugraron con "guerra sucia"). Cada quien sabe su cuento.

Pero una vez pasado todo este numerito el horizonte político apunta al 2012. Por eso creo firmemente que en México los periodos presidenciales deberían durar cuatro años.

Porque ya todo tiene qué ver con la sucesión presidencial, al presidente en turno ya nadie lo pela. Ahí anda el pobrecito Felipín haciendo unos perdidos espantosos. Mientras todos los partidos (bueno, en realidad sólo hay tres, los otros ni huelen, ni hieden) y todos los actores políticos sólo hablan del 2012. Beatriz dice que regresan, Peña Nieto ya casi está sentado (que se acuerde del peje hace cuatro años), Chucho, Marcelo y AMLO hablan de unir las izquierdas (¿pos cuántas son?). Y el padawan de Calderón dice que nadie los va a sacar de donde están (¿hundidos en un arroyo de olvido anegado?) .
Y ahí van los candidatos, todos, líderes de partido, gobernadores, senadores, diputados, todos se apuntan. Aunque sepan bien que no tienen ninguna oportunidad ahí están de tercos. Todos levantan la manita, todos quieren ir a la fiesta. Pero pocos serán los convidados ¡já!

Mientras, mi Felipe sigue trabajando por este país, luchando contra los horribles narcos que quieren arrebatarle la felicidad a nuestros hijos. Generando empleos para todos los mexicanos. Ocupando su tiempo en sacarnos de esta crisis que tanto nos agobia. Cargando en sus hombros el bienestar de toda la república...
¿Y para qué? Si ya nadie le hace caso, si ya nadie lo voltea a ver, ya todos están en sus marcas, casi listos para el banderzo de salida.

"2012, hora de elegir" rezarán algún slogan de esos que lanzan las brillantes cabezas que arman programas especiales. Faltan dos años, pero ya sabemos que en este país las campañas son más largas que la cuaresma (Fox se aventó casi nueve años), así que nos chutaremos a toda esta runfla de huevones en todos lados. Prometiéndonos la luna, las estrellas, el infinito y más allá. Ni modo, es el valor de la democracia.

Aunque pensándolo bien si los sexenios fueran de cuatro años todos empezarían a postularse a los dos. ¡No, no, qué horror! Mejor lo dejamos así.
Obituario: ¿Andrés Manuel López Obrador se puede reelegir? Digo, es el presidente legítimo ¿no?

1 comentario:

  1. MI QUERIDO CHARLY, CREER QUE SEXENIOS DE CUATRO VAN A RESOLVER ALGO ES CVOMO EVITAR UN ALCANCE DE TRENES QUITANDO EL ÚLTIMO VAGÓN DEL DE ADELANTE Y EL PRIMERO DEL DE ATRÁS. RAFAEL CARDONA

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