A propósito de informes, esta semana aparecieron al aire algunos spots del quinto informe de gobierno del dirigente del Estado de México, Enrique Peña Nieto.
Y en uno de ellos, el mandatario viaja en la parte trasera de un auto (supongo que trae chofer), va en mangas de camisa, con la corbata floja y en actitud desparpajada. Y platica con alguien…
Dice el buen Enrique que hoy el mundo y su gente es distinta y que por eso la forma de hacer gobierno tiene qué ser diferente… Sí, claro, es correcto, muera el viejo PRI, olvidémonos de eso.
Dice que se gobierna con trabajo… Y es que el mexiquense es bien trabajador. ¿A poco creen que ir al Vaticano a cacarear su boda con reconocida actriz de telenovelas no cuesta trabajo? O cuando se aparece en las finales del fútbol echándole porras a sus diablos, Quique también se cansa, no se crean.
Dice también que se gobierna resolviendo. ¡Exacto mi gober! (este sí es, literalmente, “precioso”), Igualito que como hizo con el caso Paulette, en chinga lo solucionó.
Dice que se gobierna imaginando, diseñando el futuro… ¡Pues sí! Ya hay que irse imaginando sentado en la grande.
Después viene lo mejor: “Pero más importante es gobernar escuchando y asumiendo compromisos y cumpliendo”… Ahí si me deja sin palabras, interpreten mi silencio.
Y remata: “Cuando llegas y entras en contacto con la gente es ahí donde encuentras la inspiración, la energía para salir adelante”… Claro, la gente, el contacto, la inspiración, ¿cuántas inundaciones lleva? Digo, ahí se hace presente (siempre de la mano de su punching bag, don Felipe).
En fin, ya arrancó la carrera y Enriquito lleva una muy buena ventaja. Pero eso sí, que se acuerde del “peje”, que la tenía, era suya y, como Arabena (el caballo de Don Gato), se detuvo antes de cruzar la meta para sonreír y tomarse fotos.
Obituario: Agarraron a “la Barbie”, pero sin los coches, sin las casas y sin la ropa. Los accesorios se venden por separado. Por cierto, a muy poco tiempo del informe de Calderón, fue una detención muy oportuna ¿no?
martes, 31 de agosto de 2010
viernes, 27 de agosto de 2010
También existe el sur…
...Y es testigo de la triste realidad de las y los trabajadores que emigran desde centro y sudamérica hacia Estados Unidos o hacia el propio México y que son víctimas de graves abusos laborales y personales.
La frontera norte de nuestro país acapara una gran atención por parte de los medios, de las autoridades nacionales y de la comunidad internacional. Tanto así, que la realidad que se vive en la frontera sur a menudo se eclipsa y recibe muy pocos reflectores.
En muchos aspectos (yo diría que casi en todos) el norte es el objetivo, bueno, hasta en la famosa “guerra” contra el crimen del gobierno del presidente Calderón el norte es tratado con más esmero y recibe más recursos. Todos vemos hacia el norte.
Pero el sur también está en el mapa, se suele ignorar que México es un país muy importante de tránsito y destino de migrantes, centroamericanos y sudamericanos, que cruzan y llegan al sur de nuestro país a trabajar. Y que sufren todos los días por la gravedad de los abusos y las violaciones que se cometen contra sus derechos.
Los abusos tienen que ver con atropellos a sus derechos laborales, pero también con ataques a la seguridad personal de estos trabajadores y trabajadoras. Y si eres mujeres tantito peor, las mujeres son las víctimas más vulnerables, en un escenario donde los secuestros y las violaciones sexuales están a la orden del día. Muchas de las mujeres migrantes se auto inyectan métodos anticonceptivos porque saben que corren peligro de ser violadas. Además, las menores son a menudo víctimas de redes de tráfico de personas.
La gente que cruza corre siempre el riesgo de ser extorsionada, robada, violada o secuestrada por algún grupo criminal. Ahí participan también personas infiltradas en la zona que se dedican a observar y a escuchar a los migrantes, para saber quiénes de ellos tienen familia en los Estados Unidos, y quiénes pueden tener dinero.
La política migratoria que el gobierno federal aplica para el sur es un espejo de las exigencias de nuestros vecinos del norte. Esta política tiene como objetivo, igualito que doña Brewer, convertir a la frontera sur en un “muro de contención” de los migrantes. Ya saben, "no hagas a otros lo que no quieras que te hagan a ti", o lo que es lo mismo "trata como quieras que te traten". Pero ¿para qué pedirle paras al olmo. Tenemos un gobierno que ni nos ve, ni nos oye. ¡Qué triste!
Obituario: “Si el norte fuera el sur sería la misma porquería” , el poeta Ricardo Arjona sigue teniendo razón.
lunes, 23 de agosto de 2010
Cuarto informe
El artículo 69 de la Constitución federal define los lineamientos con los que el primer mandatario dará cuenta de las actividades de la Federación durante los últimos 365 días: “En la apertura de sesiones ordinarias del primer periodo de cada año de ejercicio del Congreso, el presidente de la República presentará un informe por escrito”, establece el precepto.
Ajá, sí, pero la ambigüedad de tal precepto deja lugar a muchas dudas, "presentará", dice el librito, pero no establece si debe acudir a leerlo al recinto donde se instala el congreso (que, por cierto, podría ser el patio de mi casa, aunque sea particular), si lo puede mandar con algún achichincle cercano o si lo puede enviar por DHL o UPS.
Entonces, por ese simple hecho, cada que septiembre se aproxima, nuestra singular clase política se política se enfrasca en tan inservible discusión.
No olvidemos que fue el congreso el que reformó la ley y prohibió que el Presidente en turno diera su informe en el Congreso, argumentando que ese era el dia del Presidente, que se cerraban calles y se molestaba a la ciudadania. Ahora, parte de ese mismo congreso le exige que regrese, ya no entiendo.
Tal vez Felipe Calderón piensa que debe, pero no puede, porque la rechifla, los gritos y los sombrerazos serán inevitables. Tal vez le recuerda al día que tomó posesión, ¡qué miedo! Seguro que ya no tiene ganas de tomas de televisión cerradas, puertas falsas, cadenas humanas, empujones, zopapos, codazos, ni close ups.
Que haga lo que quiera, de todos modos, el dos de septiembre, seguro hace su fiesta en Palacio Nacional y se chuta dos horas leyendo su precioso informe. Y nos va a decir que vamos ganando la guerra, que se crearon quinientos ochenta mil nuevos empleos, que se han construido más carreteras que en cualquier otro sexenio, que la educación va de maravilla, que la economía va mejor que nunca, que ya casi llegamos al primer mundo, que se construyeron muchas clínicas y hospitales y que en su sexenio ya tenemos más del doble de "ninis" que están instalados en la fiaca.
Obituario: En algún momento yo también fui "nini", pero cuando a mí me tocó no había tanta competencia.
Ajá, sí, pero la ambigüedad de tal precepto deja lugar a muchas dudas, "presentará", dice el librito, pero no establece si debe acudir a leerlo al recinto donde se instala el congreso (que, por cierto, podría ser el patio de mi casa, aunque sea particular), si lo puede mandar con algún achichincle cercano o si lo puede enviar por DHL o UPS.
Entonces, por ese simple hecho, cada que septiembre se aproxima, nuestra singular clase política se política se enfrasca en tan inservible discusión.
No olvidemos que fue el congreso el que reformó la ley y prohibió que el Presidente en turno diera su informe en el Congreso, argumentando que ese era el dia del Presidente, que se cerraban calles y se molestaba a la ciudadania. Ahora, parte de ese mismo congreso le exige que regrese, ya no entiendo.
Tal vez Felipe Calderón piensa que debe, pero no puede, porque la rechifla, los gritos y los sombrerazos serán inevitables. Tal vez le recuerda al día que tomó posesión, ¡qué miedo! Seguro que ya no tiene ganas de tomas de televisión cerradas, puertas falsas, cadenas humanas, empujones, zopapos, codazos, ni close ups.
Que haga lo que quiera, de todos modos, el dos de septiembre, seguro hace su fiesta en Palacio Nacional y se chuta dos horas leyendo su precioso informe. Y nos va a decir que vamos ganando la guerra, que se crearon quinientos ochenta mil nuevos empleos, que se han construido más carreteras que en cualquier otro sexenio, que la educación va de maravilla, que la economía va mejor que nunca, que ya casi llegamos al primer mundo, que se construyeron muchas clínicas y hospitales y que en su sexenio ya tenemos más del doble de "ninis" que están instalados en la fiaca.
Obituario: En algún momento yo también fui "nini", pero cuando a mí me tocó no había tanta competencia.
miércoles, 18 de agosto de 2010
Micro-estrés
En “Un día de furia” (Falling down, 1993) Michael Douglas está “estacionado” en el tráfico (ajá, igualito que el viaducto a las ocho y media de la mañana) y observa cómo todos a su alrededor se miran unos a otros y se conforman permaneciendo quietos en sus vehículos, esperando, simplemente esperando. En un ataque progresivo de ira (la verdad es que sí se ve muy encabronado), abandona su coche ante la tensión, la frustración y el estrés que genera la vida moderna. Entonces decide enfrentarse a las adversidades y lo hace de forma violenta… ¡Se pone muy loco!
Otras muchas personas en la vida real quisiéramos hacer lo mismo, pero no lo hacemos, supongo que por civismo, y a cambio soportamos todo lo que se sufre viviendo en esta lindísima ciudad (y supongo que en otras tantas también).
Por eso y muchas otras cosas confieso que estoy harto de manejar, padezco de neurosis y estrés, además de que la gente se transforma cuando maneja un coche. Todo aquél que toma un volante se siente Ayrton Senna Da Silva, así que todos somos imbéciles, menos él. Además, no hay qué olvidar que te ves involucrado en discusiones, accidentes, mentadas de madre y otras linduras...
¿Y si decidiera dejar mi coche y viajara en los hermosos microbuses?
Microbuses: su clave de éxito es que, salvo en algunos lados, hacen paradas en cualquier punto, y tienen muchas más rutas que líneas del metro, trolebús, RTP y tren ligero juntas. Son conducidos, invariablemente por un Quijote que lleva a su Dulcinea en un banquito y a su fiel escudero haciendo las veces de heraldo, recibiendo a la gente y anunciando la ruta. Además, en el microbús puedes ir escuchando los éxitos tropicales del momento, vivir la emocionante experiencia de un asalto, o de un choque, o puedes sentir la emoción de ir colgado en la puerta sintiendo el viento. También son bien padres las carreras entre ellos y las competencias para ver quién gana más pasaje. Aparte son térmicos, cuando afuera hace frío, por algún extraño motivo hace más frio adentro. Y cuando hace calor, el micro por dentro es un verdadero horno.
De manera resumida se dice que el hombre proviene del mono... Y el mono debe provenir del microbusero…
¿Quién los pondrá en orden algún día? ¿Qué intereses se ocultan detrás de las rutas para seguir manteniendo en el volante a gente que sólo se distingue de los demás por su ignorancia, pedantería y falta de valores?
No quiero generalizar, pero el microbusero educado es un garbanzo de a libra.
Obituario: Sigue el pleito contra los curitas. Marcelo ya demandó. Y Sandoval sigue cagado de la risa.
Otras muchas personas en la vida real quisiéramos hacer lo mismo, pero no lo hacemos, supongo que por civismo, y a cambio soportamos todo lo que se sufre viviendo en esta lindísima ciudad (y supongo que en otras tantas también).
Por eso y muchas otras cosas confieso que estoy harto de manejar, padezco de neurosis y estrés, además de que la gente se transforma cuando maneja un coche. Todo aquél que toma un volante se siente Ayrton Senna Da Silva, así que todos somos imbéciles, menos él. Además, no hay qué olvidar que te ves involucrado en discusiones, accidentes, mentadas de madre y otras linduras...
¿Y si decidiera dejar mi coche y viajara en los hermosos microbuses?
Microbuses: su clave de éxito es que, salvo en algunos lados, hacen paradas en cualquier punto, y tienen muchas más rutas que líneas del metro, trolebús, RTP y tren ligero juntas. Son conducidos, invariablemente por un Quijote que lleva a su Dulcinea en un banquito y a su fiel escudero haciendo las veces de heraldo, recibiendo a la gente y anunciando la ruta. Además, en el microbús puedes ir escuchando los éxitos tropicales del momento, vivir la emocionante experiencia de un asalto, o de un choque, o puedes sentir la emoción de ir colgado en la puerta sintiendo el viento. También son bien padres las carreras entre ellos y las competencias para ver quién gana más pasaje. Aparte son térmicos, cuando afuera hace frío, por algún extraño motivo hace más frio adentro. Y cuando hace calor, el micro por dentro es un verdadero horno.
De manera resumida se dice que el hombre proviene del mono... Y el mono debe provenir del microbusero…
¿Quién los pondrá en orden algún día? ¿Qué intereses se ocultan detrás de las rutas para seguir manteniendo en el volante a gente que sólo se distingue de los demás por su ignorancia, pedantería y falta de valores?
No quiero generalizar, pero el microbusero educado es un garbanzo de a libra.
Obituario: Sigue el pleito contra los curitas. Marcelo ya demandó. Y Sandoval sigue cagado de la risa.
lunes, 16 de agosto de 2010
Las suspicacias del Cardenal...
El cardenal Juan Sandoval Íñiguez, arzobispo de Guadalajara, se lanzó contra los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación a quienes llamó "maiceados"–que reciben dinero– por Marcelo Ebrard para cometer su "batea de babas" de permitir que se unan en matrimonio parejas del mismo sexo y que ahora analicen permitir también que parejas no heterosexuales puedan adoptar niños –cosa que efectivamente aprobaron-.
Entre otras linduras dijo el Cardenal que: “Esto es una aberración, que obedece a intereses internacionales que van por la línea del malthusianismo de muy alto poder económico y publicitario (Thomas Malthus predijo que la sobrepoblación provocaría la extinción de la raza humana para el año 1880, cosa que, desde luego, no ocurrió), que van por la línea del mal y que están empeñados en que la población del mundo disminuya, sobre todo en el tercer mundo, porque dicen que nos estamos acabando los recursos de la tierra y han lanzado una serie de medidas desde hace varios años como la anticoncepción, el aborto, el amor libre, la perversión de la niñez y la juventud, la píldora del día después, el divorcio exprés y el matrimonio entre homosexuales, que por supuesto son estériles, que van en esa línea del malthusianismo orquestada desde altos niveles, que está muy bien pagada”.
El brillante pensador preguntó a los reporteros si “alguno de ustedes les gustaría que lo adoptaran un par de maricones o un par de lesbianas”… ¡Simplemente sin palabras!
Hugo Valdemar, vocero de la Arquidiócesis, también le entró al garlito y declaró que las “leyes de Ebrard dañan más que el narco”. Háganme favor, ese es el sentir de la iglesia, un pensamiento enano, retrógada. Como si ellos tuvieran la autoridad moral para decirle a la sociedad qué hacer y qué no hacer… Señores de la iglesia ¡Este es un estado laico!
¡LAICO! adj. No eclesiástico ni religioso, civil. O sea, que la iglesia no se mete, pues.
Necesitaría a Francisco Martín Moreno (enorme y admirado historiador) para que nos explicara cómo y por qué la iglesia le ha puesto en la madre a este nuestro México, pero para eso están todos sus fantásticos libros (harto recomendables).
Por lo pronto el gallinero se puso loco, el Cardenal aventó caca al ventilador y los embarró a todos, La campana apenas sonó, seguro serán varios rounds, hagan sus apuestas.
Obituario: A propósito de momios, Manuel Espino se destapó para el 2012, ¿alguien apostará por él?
Entre otras linduras dijo el Cardenal que: “Esto es una aberración, que obedece a intereses internacionales que van por la línea del malthusianismo de muy alto poder económico y publicitario (Thomas Malthus predijo que la sobrepoblación provocaría la extinción de la raza humana para el año 1880, cosa que, desde luego, no ocurrió), que van por la línea del mal y que están empeñados en que la población del mundo disminuya, sobre todo en el tercer mundo, porque dicen que nos estamos acabando los recursos de la tierra y han lanzado una serie de medidas desde hace varios años como la anticoncepción, el aborto, el amor libre, la perversión de la niñez y la juventud, la píldora del día después, el divorcio exprés y el matrimonio entre homosexuales, que por supuesto son estériles, que van en esa línea del malthusianismo orquestada desde altos niveles, que está muy bien pagada”.
El brillante pensador preguntó a los reporteros si “alguno de ustedes les gustaría que lo adoptaran un par de maricones o un par de lesbianas”… ¡Simplemente sin palabras!
Hugo Valdemar, vocero de la Arquidiócesis, también le entró al garlito y declaró que las “leyes de Ebrard dañan más que el narco”. Háganme favor, ese es el sentir de la iglesia, un pensamiento enano, retrógada. Como si ellos tuvieran la autoridad moral para decirle a la sociedad qué hacer y qué no hacer… Señores de la iglesia ¡Este es un estado laico!
¡LAICO! adj. No eclesiástico ni religioso, civil. O sea, que la iglesia no se mete, pues.
Necesitaría a Francisco Martín Moreno (enorme y admirado historiador) para que nos explicara cómo y por qué la iglesia le ha puesto en la madre a este nuestro México, pero para eso están todos sus fantásticos libros (harto recomendables).
Por lo pronto el gallinero se puso loco, el Cardenal aventó caca al ventilador y los embarró a todos, La campana apenas sonó, seguro serán varios rounds, hagan sus apuestas.
Obituario: A propósito de momios, Manuel Espino se destapó para el 2012, ¿alguien apostará por él?
viernes, 13 de agosto de 2010
Babel
…Y nadie entendió nada…
Ayer, el presidente Calderón se reunió con los 32 gobernadores (sí Marcelo, tú también cuentas como gobernador) , bueno, 30, porque dos no pudieron asistir a tan importante evento. Ya antes se había reunido con los representantes de las iglesias (casi todas, los carmelitos de la orden del fénix no fueron requeridos), con los medios y con el poder judicial. Y el resultado fue el mismo de siempre: ¡pura demagogia! "No escatimamos recursos” dijo alguien, “hay qué coaptar los recursos de los narcos” apuntó alguien más, “es hora de un pacto nacional”, señaló otro. Y así, frases como “la ciudadanía espera más”, “abrir el debate”, “combatir sin miramientos”, “ser implacables”, “coordinarnos mejor”, “ser más responsables” y un largo etcétera se repitieron no solo ayer, sino toda la semana, y seguramente se seguirán repitiendo por un rato más.
Recordemos que el presidente Felipe Calderón convocó, desde el 2 de agosto, a ONG's, académicos, expertos en seguridad, asociaciones religiosas, partidos políticos, representantes del Poder Judicial y a los gobernadores para debatir la estrategia de seguridad contra el narcotráfico, ajá, pero ya lo dijo la destacada intelectual Lucero Hogaza: ¿y…?
Pues nada, el presidente les responde que sí, que tienen razón, que hay que trabajar, que México es un país hermoso, que bla, bla, bla...
Y a nosotros, los de a pie nos dejan en las mismas, no nos sirven los discursos, esto es como el amor, las promesas y las palabras se las lleva el viento, ¡se necesitamos hechos señores!
Mientras al país se lo está llevando la chingada, nuestros gobernantes debaten, platican, riñen, lidian, rivalizan. Claro, sin entenderse unos con otros, como si hablaran idiomas distintos, no hacen nada, no solucionan nada. Por eso hoy quiero parafrasear a Luz María Dávila, la mamá de dos jóvenes asesinados en Juárez: “No me diga que sí, ¡haga algo, señor Presidente!”
Obituario: El club América le debe lana a Cabañas, de eso sí se acuerda perfectamente.
Ayer, el presidente Calderón se reunió con los 32 gobernadores (sí Marcelo, tú también cuentas como gobernador) , bueno, 30, porque dos no pudieron asistir a tan importante evento. Ya antes se había reunido con los representantes de las iglesias (casi todas, los carmelitos de la orden del fénix no fueron requeridos), con los medios y con el poder judicial. Y el resultado fue el mismo de siempre: ¡pura demagogia! "No escatimamos recursos” dijo alguien, “hay qué coaptar los recursos de los narcos” apuntó alguien más, “es hora de un pacto nacional”, señaló otro. Y así, frases como “la ciudadanía espera más”, “abrir el debate”, “combatir sin miramientos”, “ser implacables”, “coordinarnos mejor”, “ser más responsables” y un largo etcétera se repitieron no solo ayer, sino toda la semana, y seguramente se seguirán repitiendo por un rato más.
Recordemos que el presidente Felipe Calderón convocó, desde el 2 de agosto, a ONG's, académicos, expertos en seguridad, asociaciones religiosas, partidos políticos, representantes del Poder Judicial y a los gobernadores para debatir la estrategia de seguridad contra el narcotráfico, ajá, pero ya lo dijo la destacada intelectual Lucero Hogaza: ¿y…?
Pues nada, el presidente les responde que sí, que tienen razón, que hay que trabajar, que México es un país hermoso, que bla, bla, bla...
Y a nosotros, los de a pie nos dejan en las mismas, no nos sirven los discursos, esto es como el amor, las promesas y las palabras se las lleva el viento, ¡se necesitamos hechos señores!
Mientras al país se lo está llevando la chingada, nuestros gobernantes debaten, platican, riñen, lidian, rivalizan. Claro, sin entenderse unos con otros, como si hablaran idiomas distintos, no hacen nada, no solucionan nada. Por eso hoy quiero parafrasear a Luz María Dávila, la mamá de dos jóvenes asesinados en Juárez: “No me diga que sí, ¡haga algo, señor Presidente!”
Obituario: El club América le debe lana a Cabañas, de eso sí se acuerda perfectamente.
miércoles, 11 de agosto de 2010
A ras de pasto
Estoy viendo la televisión. Se termina el primer tiempo de un partido de fútbol (del que ustedes quieran), antes de mandar a los muchísimos compromisos comerciales que tienen las televisoras, el comentarista dice: -Vamos a la cancha, allá se encuentra nuestro compañero reportero, ¡adelante!
-Muchas gracias, así es, estamos con el jugador que porta la camiseta número veintisiete -dice al tiempo que empieza la entrevista-. Veintisiete, complicado partido, una primera parte difícil, llena de contrates, con mucha llegada, pero poca definición, en la segunda parte sin duda tienen qué salir a conseguir el gol.
Acto seguido le pone el micrófono al futbolista quién, con mucha seguridad atina a responder: -Sí, complicado, difícil, con mucho contraste, creo que hemos tenido llegada, pero no la hemos metido. En el segundo tiempo tenemos qué meterla si queremos sacar el resultado...
-Muchas gracias veintisiete.
-Gracias, un saludo a la afición.
Y así se da por terminado ese bonito ejercicio. El jugador se va al vestidor y nuestro amigo reportero manda a comerciales...
Cuando de deportes se trata, los reporteros que están en el campo no preguntan, ¡afirman! Y por supuesto reciben por respuesta lo mismo que "preguntan". Y a eso súmenle que los futbolistas no suelen ser muy inteligentes. ¿Qué, nadie les dice nada? ¡Son valiosos minutos en televisión! Siempre me he preguntado ¿por qué? Y simplemente no encuentro una respuesta. Yo no entiendo.
Hace mucho tiempo en un partido entre América y Veracruz el público del Azteca pedía a gritos la entrada al campo de Antonio Carlos Santos, grandísimo jugador (a pesar de jugar en tal club), el comentarista le preguntó a Anselmo Alonso (quien estaba "a ras de pasto"): -¿Qué grita la gente Anselmo?
A lo que Alonso respondió, sagaz: -La gente grita "Santos, Santos, Santos".
Después vino un silencio incómodo como de tres o cuatro segundos. Imborrable momento de la televisión mexicana.
Obituario: "El gol lo platicamos todos" no es una creación de Enrique Bermúdez, es una creación de Lalo Camarena (él sí, brillante periodista deportivo). Luego le pido permiso y les cuento.
-Muchas gracias, así es, estamos con el jugador que porta la camiseta número veintisiete -dice al tiempo que empieza la entrevista-. Veintisiete, complicado partido, una primera parte difícil, llena de contrates, con mucha llegada, pero poca definición, en la segunda parte sin duda tienen qué salir a conseguir el gol.
Acto seguido le pone el micrófono al futbolista quién, con mucha seguridad atina a responder: -Sí, complicado, difícil, con mucho contraste, creo que hemos tenido llegada, pero no la hemos metido. En el segundo tiempo tenemos qué meterla si queremos sacar el resultado...
-Muchas gracias veintisiete.
-Gracias, un saludo a la afición.
Y así se da por terminado ese bonito ejercicio. El jugador se va al vestidor y nuestro amigo reportero manda a comerciales...
Cuando de deportes se trata, los reporteros que están en el campo no preguntan, ¡afirman! Y por supuesto reciben por respuesta lo mismo que "preguntan". Y a eso súmenle que los futbolistas no suelen ser muy inteligentes. ¿Qué, nadie les dice nada? ¡Son valiosos minutos en televisión! Siempre me he preguntado ¿por qué? Y simplemente no encuentro una respuesta. Yo no entiendo.
Hace mucho tiempo en un partido entre América y Veracruz el público del Azteca pedía a gritos la entrada al campo de Antonio Carlos Santos, grandísimo jugador (a pesar de jugar en tal club), el comentarista le preguntó a Anselmo Alonso (quien estaba "a ras de pasto"): -¿Qué grita la gente Anselmo?
A lo que Alonso respondió, sagaz: -La gente grita "Santos, Santos, Santos".
Después vino un silencio incómodo como de tres o cuatro segundos. Imborrable momento de la televisión mexicana.
Obituario: "El gol lo platicamos todos" no es una creación de Enrique Bermúdez, es una creación de Lalo Camarena (él sí, brillante periodista deportivo). Luego le pido permiso y les cuento.
lunes, 9 de agosto de 2010
¡Qué triste es decirnos adiós!
Con un merecido homenaje en Bellas Artes México despidió a Roberto Cantoral...
No voy a hacer aquí una semblanza, durante todo el día, en todos lados habrá oportunidad de ver y oír muchas (unas muy buenas y otras francamente muy malas. De estas última hoy he oído varias)
La casa del compositor, en Lindavista, tiene pintada en la fachada un pentagrama con las notas de "El Reloj", sin duda esas notas también están pintadas en la cultura popular de este país.
Cantoral escribió muchas canciones de "despedida", es decir, diciéndole adiós a un amor: "El reloj", "La barca", "Al final", "El triste", "Noche no te vayas", "Regálame esta noche", "Yo lo comprendo", entre otras. Son canciones hermosas que reflejan muchísimo dolor. Son canciones que podrían ser secuelas. Hasta podríamos decir que se le ocurrieron en la misma noche ¿no?
Cantoral le habla al amor que se va, se le enfrenta, le habla a la cara, le grita su dolor, le cuenta su pena, ruega, implora, pide que el amor simplemente no desaparezca.
Pero sabe perfectamente que va a desaparecer, porque todo en la vida, aunque sabe que lastima, lo que empieza termina. Y cuando ya no tiene ninguna esperanza y el tic tac le recuerda su irremediable dolor y no concibe que la distancia es el olvido, aún puede pedirle al reloj que no marque las horas, a la noche que se quede para siempre y al amor que le retrase la muerte, porque prefiere morir que separarse. Aunque al final sabe que se quedará como un cristo, con los brazos abiertos...
Así, lo único que le queda es saborear su dolor, sin pedir compasión, ni piedad.
Maestro: Hoy nuestra playa se viste de amargura, porque su barca tiene qué partir... Su muerte nos cubre de angustiosa soledad.
Obituario: La playa de "la barca" es la playa Miramar y está en Tampico, Tamaulipas, donde nació Roberto Cantoral en 1935. ¡Adiós paisano!
No voy a hacer aquí una semblanza, durante todo el día, en todos lados habrá oportunidad de ver y oír muchas (unas muy buenas y otras francamente muy malas. De estas última hoy he oído varias)
La casa del compositor, en Lindavista, tiene pintada en la fachada un pentagrama con las notas de "El Reloj", sin duda esas notas también están pintadas en la cultura popular de este país.
Cantoral escribió muchas canciones de "despedida", es decir, diciéndole adiós a un amor: "El reloj", "La barca", "Al final", "El triste", "Noche no te vayas", "Regálame esta noche", "Yo lo comprendo", entre otras. Son canciones hermosas que reflejan muchísimo dolor. Son canciones que podrían ser secuelas. Hasta podríamos decir que se le ocurrieron en la misma noche ¿no?
Cantoral le habla al amor que se va, se le enfrenta, le habla a la cara, le grita su dolor, le cuenta su pena, ruega, implora, pide que el amor simplemente no desaparezca.
Pero sabe perfectamente que va a desaparecer, porque todo en la vida, aunque sabe que lastima, lo que empieza termina. Y cuando ya no tiene ninguna esperanza y el tic tac le recuerda su irremediable dolor y no concibe que la distancia es el olvido, aún puede pedirle al reloj que no marque las horas, a la noche que se quede para siempre y al amor que le retrase la muerte, porque prefiere morir que separarse. Aunque al final sabe que se quedará como un cristo, con los brazos abiertos...
Así, lo único que le queda es saborear su dolor, sin pedir compasión, ni piedad.
Maestro: Hoy nuestra playa se viste de amargura, porque su barca tiene qué partir... Su muerte nos cubre de angustiosa soledad.
Obituario: La playa de "la barca" es la playa Miramar y está en Tampico, Tamaulipas, donde nació Roberto Cantoral en 1935. ¡Adiós paisano!
viernes, 6 de agosto de 2010
De memoria
Tengo buena memoria, recuerdo detalles, personas, rostros, fechas (sobre todo fechas, y eso a veces acarrea problemas), etc. Pero mi memoria inmediata es pésima. Es decir, tengo buen disco duro, pero mi memoria en ram es malísima. Si me dan un teléfono se me olvida cuando voy a empezar a apuntar. Soy como Dori, la de "buscando a Nemo"
Gozo de buena memoria, supongo que por eso me da pavor perderla. Tener Alzheimer me da miedo.
Imagínense ustedes: volverse, poco a poco, olvidadizo, y estar cada vez más confundido. A veces, no poder recordar, cuando estamos al pie de la escalera, si vamos a subir o si acabamos de bajar. Y en ocasiones, frente al refrigerador, nuestra pobre mente se vuelve a llenar de dudas, ¿acabamos de guardar alguna comida, o venimos para sacar algo? Y otras veces, cuando afuera está todo oscuro y tenemos el gorro de dormir en la cabeza (habrá quién use ¿no?), no estar seguros si nos vamos a dormir, o si nos acabamos de levantar.
Todo esto viene a cuento porque hoy estaba leyendo que existen "ejercicios" para el cerebro, que sirven para contrariar esta tendencia, éstos hacen a las personas pensar solamente en lo que están haciendo, concentrándose en esa tarea. El desafío es hacer todo aquello contrario a la rutina, obligando al cerebro a un trabajo adicional.
Y la verdad están interesantes:
-Usar el reloj, en la muñeca contraria a la que normalmente lo usamos.
-Cepillarse los dientes con la mano contraria a la de costumbre.
-Caminar por la casa, de espaldas (en China, esta rutina la practican en los parques).
-Vestirse con los ojos cerrados.
-Estimular el paladar con cosas diferentes (el pozole ya no es una opción).
-Ver las fotos al revés
-Mirar la hora en el espejo.
-Cambiar de camino para ir y volver del trabajo (esto también ayuda a despistar malandrines).
La idea es cambiar el comportamiento de nuestra rutina. Intentar hacer algunas cosas diferentes, con el otro lado del cerebro, estimulándolo de esa manera.
¿Que tal si empezamos en este momento, enviando a todos sus contactos la dirección de este bonito blog, usando el mouse con la otra mano?
Obituario: Nunca sabremos si Cabañas no recurda o prefiere no recordar.
miércoles, 4 de agosto de 2010
¿Legalizar o no legalizar?
Si cuando se legalizó el alcohol se inventaron las vinaterías me imagino que en esta situación se abrirían muchas "droguerías" -que no serían farmacias propiamente-. Entonces uno llegaría al mostrador y pediría dos "churritos", una jeringa y un par de gramos...
-¿Un tianguis en dónde? Sí, claro, que lo pongan, que lo pongan.
Como dice mi papá: los tianguis son bien bonitos, siempre y cuando no los tengas en la puerta de tu casa.
-Los dos gramos son para metermelos aquí -sería la petición-. Los churros y la jeringa para llevar, por favor.
Por supuesto que esto es imposible, pero no por el hecho de la distribución o el libre consumo. Sería imposible porque todo este asunto de la droga es una red de corrupción que sabrá Dios dónde termina (o donde empieza).
Todo es dinero, todo se mueve con la lana, ¿a quién le convendría legalizar? La verdad a nadie.
Pienso en los tianguis. Que podrían ejemplificar la situación. Uno se pone los domingos en calzada del hueso y ocupa todo un sentido de tal avenida, desde cafetales hasta sauzales (como kilómetro y medio de distancia). Y el caos impera en el otro sentido, porque todos los automovilistas van y vienen por ese carril. Aumenten ustedes a los lindísimos microbuseros, camiones, y un trolebús. Es un verdadero desastre.
Pero ¿quién permite tal cosa? Pues la lana que seguramente se recauda con los "donativos" de los locatarios, que no debe ser cosa menor. A alguien (quienquiera que sea) le cae muy bien ese dinero. Entonces el bienestar de la población simplemente les viene valiendo sorbete.
-¿Un tianguis en dónde? Sí, claro, que lo pongan, que lo pongan.
Como dice mi papá: los tianguis son bien bonitos, siempre y cuando no los tengas en la puerta de tu casa.
Obituario: El señor Calderón ya va aprendiendo. Con una sola frase puso agenda y nos puso a correr a todos. Ahí la lleva, el espurio se instruye del legítimo.
lunes, 2 de agosto de 2010
La hueva del sol
Siempre he admirado a la gente que canta, que canta de a de veras. Luis Miguel es de esos, es un gran cantante, admiro su enorme talento, su capacidad interpretativa y su extraordinaria calidad como artista. Debo confesar que soy fan.
Sin embargo también admiro la inteligencia que tiene para burlarse de todos nosotros (los fans y los medios) y hacer lo que le venga en gana cada vez que se le ocurre.
Entendámonos bien: La primera vez que fui a ver al "Sol" en una de esas temporadas que hace en el Auditorio Nacional fue en 1994. En esa serie de conciertos grabó un disco doble completamente en vivo. Y el concierto fue espectacular (digo, nunca ha ofrecido nada del primer mundo, pero ese concierto sí fue espectacular), una banda muy bien montada, coros, orquesta, mariachi, pantalla gigante, toneladas de luces y dos horas de recital...
Conforme ha pasado el tiempo, sigo comprando mi boleto cada vez que Luis Miguel se mete al coloso de reforma, compro mi entrada hasta arriba, me interesa escucharlo, no quiero verlo ¿cómo para qué? Si ya sé que es muy guapo y bronceado. Y la calidad del concierto cada vez es más pobre. En la última temporada el mariachi salió a escena, ajá, a hacer playback, las pistas, todas, están grabadas. No hay una sola corista con vestido de noche acompañando al cantante, los coros están grabados. Desde hace mucho no lo acompaña una orquesta. La banda cada vez tiene menos integrantes. Y "Micky" se pasa la hora y veinte que dura el concierto peleándose con el chícharo que trae en la oreja, haciéndole señas al ingeniero para que le suba o le baje al volumen.
Pero, eso sí, cada vez que se para en el Auditorio lo llena 30 veces ¿alguien me puede explicar por qué?
Y en cuanto a sus discos la historia es la misma. Desde "Aries", del '93, no escuchamos a un Luis Miguel diferente, tal vez lo escuchamos en distintos géneros, sí, pero todo se oye igual. Pareciera raro, pero así es. Sin embargo, cada que lanza un disco ahí vamos todos a comparlo y ahí vamos todos a cubrirlo (por eso hablaba de los medios). Y él, cagado de la risa, echado en la suite presidencial del Nikko, pensando que lo que trabajó durante diez o doce años le sirvió para vivir de sus rentas toda su vida.
Ese es Luis Miguel, sin duda el cantante más importante de los últimos años en México, un triunfador, un gran artista que presenta lo que se le antoja cuando se le antoja y como se le antoja, total, lo seguimos comprando. Yo, por lo pronto, estoy esperando que salga el disco para ir corriendo por el mío. No me culpen, ya les dije que soy fan.
Obituario: Domingo 8 de agosto, doce del día. Pumas recibe a Cruz Azul en C.U. Se reciben apuestas.
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