Es tiempo de elecciones y todo
mundo anda sobre el botín. El que se mueva no sale en la foto, pero el que no
se mueva se queda sin hueso. Por eso, como si estuvieran jugando a las
sillitas, en los últimos días hemos visto el corredero de precandidatos
alrededor de los asientos. Ahí andan todos, corre y corre, muy interesados en
sentarse. Y la música se está acabando…
Tres ejemplos:
Primero: La ex gobernadora de
Zacatecas, Amalia García, busca una diputación local por la delegación Miguel
Hidalgo… ¡Yes!
En sus seis años de gestión, la
señora García multiplicó por 46 la deuda pública de Zacatecas. Cuando por fin
se fue, el endeudamiento estatal se quedó en 5 mil 139 millones de pesos
(cuando llegó el estado debía 110 millones de pesos).
Ahora quiere ser diputada local
en Miguel Hidalgo, pero fue gobernadora de Zacatecas, aunque siempre ha vivido
en la colonia del Valle… Pero supongo que tiene buena voluntad… No entiendo.
Segundo: El distinguido y muy
decente diputado federal Ricardo Monreal Ávila solicitó su registro como
precandidato del Movimiento de Regeneración Nacional para jefe delegacional de la
delegación Cuauhtémoc. La invitación fue realizada desde noviembre por su
inseparable amigo, que digo amigo, ¡su hermano! Andrés Manuel López Obrador,
manifestando que la delegación necesita del talentoso Ricardito. Ajá, ya fue
gobernador de Zacatecas, ya fue senador, ahorita es diputado. Pero como la
nación lo requiere, él dejará su puesto para atender las necesidades de la
gente en Cuauhtémoc… ¡Sí señor! ¡Eso es responsabilidad republicana y servicio
fiel a la patria!
Tercero: Mi María Rojo, gran
actriz, repito: ACTRIZ, también quiere la Cuauhtémoc, claro, ella va por el PRD,
ente que, creo, todavía existe. La jefa de Pedrito Fernández (y luego de David
Zepeda) ya fue jefa delegacional en Coyoacán de 2000 a 2003, ¡y no saben lo
bien que lo hizo! Ah, pero antes de eso fue diputada federal plurinominal y
luego diputada local por la Asamblea Legislativa del Distrito Federal. Cuando
dejó tranquilos, felices y sin carestías a los coyoacanenses se fue a integrar
el selecto grupo de Senadores de la República.
Son tres ejemplos, esto que
estoy comentando casi no se da en este país, es bien raro, casi inaudito.
Usted, querido lector, de mera casualidad, ¿sabe de algún otro?
Obituario: Hablando del Súper
Bowl, ¡¡¡¿¿¿Por qué no corrió???!!!
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